•Pidió
mi disco de inmediato y me metió a una sala a escucharlo. La primer canción que
escuchó fue Jesús verbo no sustantivo,
después escuchó Mujeres, y luego Quién
diría y Primera
vez.
¿Tienes video? me preguntó. No... le contesté. ¿Tienes quién te lo haga?
Conozco unos amigos cineastas... Le dije. Se trataba de Daniel Gruener
(fantástico cineasta Mexicano) y Rodrigo Prieto (hoy uno de los fotógrafos más
importantes en el mundo). Hicimos el video de Mujeres y
empezó todo.
•Con
el disco de Si el norte fuera el sur vinieron
los cambios. Aloysio Reis
se fue de la compañía y el presidente Raúl Vásquez también. Me quedé solo como
al principio pero con la puerta que se había quedado abierta con los dos
primeros discos.
•Sin
el apoyo de la compañía decidí que la única manera de defender la propuesta era
haciendo teatros y me dediqué a hacerlos por toda América Latina (a los
empresarios no les gustaba) pero era la única manera de no quedar en el olvido,
por lo menos durante el tiempo que duraba la temporada.
•Hoy
sigo haciendo lo mismo que al principio, aunque ya no tengo disquera. Hoy, si
quiero quejarme por algo, lo tendré que hacer conmigo mismo y con el grupo de
locos arrebatados que decidieron emprender este camino conmigo.