•A los
21 produjo su primer disco: "Déjame Decir Que Te Amo", un trabajo que
aparentemente no gustó nada al autor y que a menudo dice estar avergonzado de
él. Fue por eso que durante cinco años, Ricardo optó por abandonar la música y
dedicarse por entero a la enseñanza, dando clases a niños de escasos recursos
de los que él también aprendía de la vida y de la supervivencia. Al mismo
tiempo estudiaba Ciencias de la Comunicación, en la especialidad de Publicidad.
Gran aficionado también al deporte, se destacó en la práctica del baloncesto, del que formó parte de la Selección Nacional de Guatemala. Durante 15 años, conservó el récord en su país como el jugador que más puntos ha conseguido en un solo partido (78).
Aunque la música había pasado a segundo término en sus ocupaciones, la idea de cantar y componer jamas fue dejada de lado.
Un buen día se le ofreció la oportunidad de grabar un disco. El producto final no le pareció muy satisfactorio y nuevamente lo intentó, con resultados más aceptables, en "S.O.S. Rescátame", en el que ya apreciaba el estilo y las tendencias musicales de Arjona.
Su siguiente disco, "Jesús: Verbo No Sustantivo", fue la revelación final de Ricardo Arjona como compositor e intérprete en toda América Latina y Estados Unidos. El tema que daba título al álbum permaneció durante meses en el número uno de las listas de todos los países centroamericanos, transformándose en el álbum más vendido de la historia en los países de esta región.
Gran aficionado también al deporte, se destacó en la práctica del baloncesto, del que formó parte de la Selección Nacional de Guatemala. Durante 15 años, conservó el récord en su país como el jugador que más puntos ha conseguido en un solo partido (78).
Aunque la música había pasado a segundo término en sus ocupaciones, la idea de cantar y componer jamas fue dejada de lado.
Un buen día se le ofreció la oportunidad de grabar un disco. El producto final no le pareció muy satisfactorio y nuevamente lo intentó, con resultados más aceptables, en "S.O.S. Rescátame", en el que ya apreciaba el estilo y las tendencias musicales de Arjona.
Su siguiente disco, "Jesús: Verbo No Sustantivo", fue la revelación final de Ricardo Arjona como compositor e intérprete en toda América Latina y Estados Unidos. El tema que daba título al álbum permaneció durante meses en el número uno de las listas de todos los países centroamericanos, transformándose en el álbum más vendido de la historia en los países de esta región.